SOCIALISTAS
UTÓPICOS
La palabra socialismos
incluye un número de grupos que aspiran a una clase de orden social nueva,
basada en la concepción económica y
social de los derechos humanos. El socialismo significa una ordenación
colectiva de los asuntos humanos sobre una base de cooperación, con la
felicidad y el bienestar de todos,
haciendo resaltar la producción y la distribución de la riqueza.
Los primeros utopistas
habían sido: Tomás Moro, Tomás Campanella, Francisco Emilio Babeur. Pero fue en
el siglo XIX cuando floreció el pensamiento del socialismo utópico. Casi todos
fueron intelectuales escritores o propietarios burgueses preocupados y
denunciadores de los estragos que el capitalismo producía en la clase
trabajadora: Robert Owen, Carlos Founier, Saint-Simon. Su propósito fue haber
sometido a crítica la incapacidad de la revolución burguesa para dar a los
trabajadores: libertad, igualdad y fraternidad.
La
gran debilidad del socialismo utópico estaba en que su crítica no se fundaba en
una reflexión o estudio del desarrollo económico (ciencia social) sino quedaba
fundada sólo en la denuncia a la luz de una sociedad futura de carácter ideal.
Consideraban
también que éste era el único camino ya que el pueblo por sí era incapaz de
organizarse y actuar por sí mismo
Principales autores del
socialismo utópico:
·
Saint-Simon (1760-1825):
Su sistema hizo aparición en la época en que el
proletariado se hallaba todavía poco desarrollado. Contrariamente a los
filósofos y sociólogos de su tiempo que defendían el régimen burgués, él lo criticaba
y soñaba con sustituir el orden social capitalista por el
socialismo. Pero al no comprender la naturaleza del capitalismo, no supo hallar
la vía del socialismo. Era de origen noble, tuvo por maestro a D'alambert, y
tomó parte en calidad de voluntario, en la guerra de independencia de Estados
Unidos.
Durante la
revolución burguesa de 1789 en Francia, renunció a su título de conde. Al
principio la revolución conquistó su simpatía pero se decepcionó cuando el
advenimiento del terror. Murió en la miseria. Como lo dijo Engels fue el
espíritu más universal de su época. En lo que concierne a la historia de la
sociedad, se eleva por encima del materialismo francés, algunas de cuyas ideas
filosóficas comparte. En tanto que los materialistas franceses consideraban el
proceso histórico como un simple encadenamiento de efectos de la casualidad,
Saint Simon defiende su teoría del determinismo histórico. Para él cada sistema
social constituye al principio, un paso adelante en la historia. El sistema
esclavista como el sistema feudal, señalan un progreso: tanto el uno como el
otro contribuyeron al desarrollo de la producción, de las ciencias, del arte.
A pesar de su
orientación idealista, emite ideas que lo acercan a la interpretación
materialista de la historia. El mayor mérito de Saint Simón consiste en su
concepción del papel de la propiedad y de las clases en el desarrollo de la
sociedad. Los fundamentos de un nuevo orden social estarían constituidos por la
gran industria científicamente y planificada, mantiene en la sociedad que
proyecta la propiedad privada y las clases. En el orden social futuro, la
función primordial debe pertenecer a la ciencia y a la industria, y a los
sabios y a los industriales. Entre estos últimos sitúa a los obreros con
iguales títulos que los burgueses, fabricantes, mercaderes, banqueros.
Su pensamiento
tiene un carácter utópico: el futuro orden industrial llegará según él, gracias
a la propaganda de la filosofía nueva "positivista". Es adversario de
la solución revolucionaria de las contradicciones del régimen capitalista. Su
doctrina no constituye un socialismo proletario científico, sino un socialismo
utópico ilusorio; no es una doctrina de dirigentes de masas proletarias, sino
de socialistas solitarios, aislados de las masas
·
Robert Owen (1771-
1858): Dirigió una gran fábrica, redujo la jornada de
trabajo a 10 horas -las demás empresas eran de 13-. Mejoró las condiciones de
vida y de trabajo de los obreros, fundó una escuela modelo para los hijos de
los obreros, organizó una un jardín infantil.
Sus ideas
filantrópicas lo condujeron al comunismo. Partió a Norteamérica para organizar
allí la colonia comunista "nueva armonía", sufrió un fracaso y volvió
a Gran Bretaña, donde tomó una parte activa en el movimiento obrero, sindical y
cooperativo, del cual se apartaría más tarde. Su doctrina terminó por tomar un
carácter apasionado. Owen murió a la edad de 87 años, y sus ideas desempeñaron
un papel positivo durante las décadas del treinta y el cuarenta del siglo
pasado. Contribuyó mucho a la instrucción de los obreros.
Estuvo cerca de
los materialistas franceses del siglo XVIII. Afirmaba que el hombre es un
producto de las circunstancias y que su carácter se forma al margen de su
voluntad. No son los hombres los culpables por sus defectos y sus vicios, sino
el régimen social en que viven. Los crímenes de los hombres son los crímenes de
la propia sociedad; castigar a los individuos víctimas de su ignorancia y de
los errores de la sociedad, es una injusticia clamorosa. No hay más que modificar
las condiciones de la vida social, mejorar el orden social, y las costumbres de
los hombres cambiarán. Para Owen la propiedad privada y las libertades
burguesas, esta sociedad era tan imperfecta como el régimen feudal, sólo la
sociedad socialista es perfecta. Se elevaba contra los economistas burgueses,
que se esforzaban en demostrar que el régimen capitalista es natural y
razonable. Según Owen la sociedad burguesa sólo es temporal. A diferencia de
los filósofos franceses que se dedicaban a reivindicar la abolición de los
privilegios de casta. Owen aspiraba a la supresión de las contradicciones de
clase, al restablecimiento de la igualdad social entre los hombres.
Criticaba
severamente al régimen capitalista: la propiedad privada, la estructura de clase,
la división del trabajo, el reino de la competencia, el agotamiento creciente
de los obreros. Estima que la raíz del mal social no está en el modo de
producción capitalista, sino en la ignorancia de los hombres, que son
inconscientes de su propia naturaleza. Creía que las contradicciones sociales
serían eliminadas por medio de la difusión de conocimientos y de la verdad.
Consideraba la historia como idealista, viendo en ella solo un progreso de los
conocimientos humanos.
Soñaba con un
orden social nuevo, el socialista, en el que la comuna sería la célula
elemental, se alzaba contra la lucha revolucionaria del proletariado. La
transformación socialista de las relaciones sociales no puede ser realizada por
medio de la violencia, por medio de la revolución, no comprendía el papel
histórico de la clase obrera. Fundaba sus esperanzas en la iniciativa de la
clase dirigente y en los gobiernos.
·
Charles Fourier
(1772- 1837): Fue
un crítico de la sociedad burguesa. Puso al desnudo la contradicción entre las ideas
y las promesas de los ideólogos de la revolución francesa, sobre la igualdad,
la fraternidad y la justicia, por una parte y la miseria material y moral de la
sociedad burguesa por la otra. El régimen burgués está pervertido. La pobreza
es un polo, es engendrada por la superabundancia. Este orden social corta al
hombre, ahoga sus sentimientos, sus deseos, sus pensamientos. Bajo el régimen
burgués, la felicidad de unos, es causa de la desgracia de otros. Bajo la
influencia de las ideas ejercidas por los materialistas franceses acerca del
papel decisivo de la educación, elabora su teoría de las pasiones humanas para
probar la necesidad del advenimiento de la sociedad socialista.
Declara Fourier
que es el régimen social el que está viciado, el hombre es substancialmente
bueno. Se trata de crear una sociedad que favorezca la plena satisfacción a las
pasiones humanas, su desarrollo y su florecimiento. A partir de estas premisas diseña
el cuadro de orden social futuro cuya célula fundamental es la falange
compuesta de "diferentes series de producción". Todos los miembros de
la falange tienen derecho al trabajo. De grado y obedeciendo en todo a sus
pasiones, se enrolan en los diferentes grupos de producción. El trabajo es
considerado en la falange como una necesidad, como una fuente de goce. La
ausencia de especialización estrecha que corta al hombre bajo el régimen
burgués contribuye a ello. En el curso de la jornada cada miembro de la falange
cambia de ocupación varias veces, así se satisface la necesidad de diversidad
propia del hombre. Fourier decía de los hombres del porvenir que su valor
vencería todos los obstáculos, que para ellos la palabra imposible no
existiría.
En la sociedad
futura los intereses del individuo coincidirán con los de la sociedad. Se
llegará a una abundancia de bienes materiales, como resultado de un trabajo
creador y altamente productivo. La distribución en la falange se hace, en lo
esencial de acuerdo al trabajo y al talento
Bajo una forma rudimentaria expresa
la idea de la supresión de la oposición entre el trabajo intelectual y el
trabajo manual, entre la ciudad y el campo.
El socialismo de Fourier tiene
carácter utópico; se oponía a la revolución violenta. Desencantado de la
revolución francesa, pensaba organizar la sociedad socialista del porvenir,
gracias a la propaganda pacífica de sus ideas. Creía en la posibilidad de crear
grupos bajo el capitalismo, Fourier se dirigía a los ricos a quienes les
confiaba sus proyectos con la esperanza de obtener subvenciones para
realizarlos. Al igual que los demás socialistas utópicos ignoró la misión
histórica de los trabajadores asalariados.
Ejerció una gran
influencia en el desarrollo de las ideas socialistas. Marx lo designaba como
uno de los patriarcas del socialismo.
Los tres fueron enemigos del
individualismo, del sistema económico de la libre competencia, y de la idea de
que una ley económica natural por si misma produciría el bien general. Los tres
coincidían en la opinión de que los asuntos económicos y sociales necesitaban
una organización colectiva de carácter positivo para fomentar el bienestar, y
que esta organización habría de basarse, en cierto modo en un principio de
cooperación y no de competencia.
Propuestas:
·
Fourieristas.-
Cultivo intenso de la tierra; Relegaban la industria y el comercio
·
Owenianos.-
Importancia de la revolución industrial. La Nueva sociedad en equilibrio la
agricultura y la industria
·
Saint-Simon:
Grandes obras de ingeniería: construcción de caminos, ferrocarriles; Organización
de los bancos y finanzas
Los Saint-Simonianos, creían
firmemente en las virtudes de una organización y una planificación científica
en gran escala, y aspiraban en transformar los estados nacionales en grandes
corporaciones productoras dominadas, por hombres de ciencia y de gran capacidad
técnica y enlazar, estos estados
regenerados mediante grandes planes del desarrollo económico y social de
amplitud mundial.
Los owenianos y fourieristas
en su mayor parte evitaban la actividad política, mientras que los Saint
Simonianos tendían a apoderarse de los estados y gobiernos y a transformarlos
de manera conveniente a sus nuevos propósitos.
Coincidían, a pesar de sus
muchas diferencias, en el punto de vista esencialmente social. Esto era verdad
por lo menos en tres sentidos diferentes, aunque relacionados:
1. Los
tres consideraban la cuestión social, la más importante de todas, e insistían
en que por encima de todo, la tarea de los hombres de bien, era promover la
felicidad y el bienestar general.
2. Los
tres consideraban esta tarea totalmente incompatible con la continuación de cualquier orden social que se basara en una
lucha de competencia entre los hombres por obtener los medios de vida, o
fomentarla.
3. Los
tres desconfiaban mucho de la política, y creían que la dirección futura de los
asuntos sociales deberían ejercerla principalmente, no los parlamentos o los
ministros, sino los productores, y que si el aspecto económico y social de los
asuntos humanos pudieran organizarse de manera adecuada, las formas
tradicionales del gobierno y de la organización política serian pronto
invalidadas, y un mundo nuevo de paz y colaboración internacional, reemplazaría
al antiguo de los conflictos dinásticos e imperialistas. Está desconfianza
hacía la política y esta creencia en que el orden político estaba destinado a
ser reemplazado por una dirección mejor de los asuntos humanos las compartían.
Había diferencias considerables. Los fourieristas y los owenianos eran
creadores de comunidades; se propusieron invalidar las sociedades antiguas y
cubrir la tierra con una red de comunidades locales fundadas en una base
verdaderamente social, y creían que estas nuevas fundaciones podían sin
violencia o revolución reemplazar las existentes. Coincidían en que los
trabajadores eran víctimas de una explotación. Se consideraban defensores de
los derechos humanos.
Karl Marx
(1813-1883) nació en
Tréveris (Renania) en el seno de una familia judía, cuyo cabeza de familia era
un abogado ilustrado, tirando a liberal. Inició los estudios en su ciudad natal
y en 1835 empezó la carrera de derecho en la Universidad de Bonn.
El objetivo de Marx
fue crear un programa de investigación social: el materialismo histórico.
El objetivo de Marx
fue analizar la sociedad capitalista, en su funcionamiento y en su destino. Las
leyes de la teoría marxista sólo son válidas para el modo de producción
capitalista. Marx quiso desvelar las contradicciones y las falacias de la
economía burguesa analizando su funcionamiento. Lo que no pudo hacer Marx fue
estudiar el socialismo por carecer de existencia; es decir, respecto a éste fue
tan utópico como los otros socialistas a los que criticaba.
La interpretación que
Marx hizo de la evolución histórica de las sociedades. El fundamento de tal
evolución se encuentra en las condiciones económicas en las que los pueblos
desarrollan su existencia. Se trata de una teoría que explica por qué
evolucionan las sociedades en su devenir histórico. Éstas acaban cambiando
cuando varía sustancialmente el sistema de producción de los bienes económicos
y con ello cambian también las formas de relacionarse las personas, tanto en sus
relaciones de producción como en sus relaciones de intercambio y también en sus
relaciones de distribución de las rentas generadas. Con las transformaciones de
la estructura económica, también cambia la mentalidad de la gente; así que a
cada tipo de estructura económica debe corresponderle una mentalidad que le sea
compatible.
Mercancía: El
concepto de mercancía de Marx arraiga en la orientación materialista de su
análisis sobre las actividades productivas de los actores. Los productos son
intercambiados en el libre mercado a cambio de dinero (valores de cambio).
Aunque son las personas las que producen objetos en el capitalismo, el papel que desempeñan en la producción de mercancías y su control sobre ellas se mistifican. Al principio creen que esos objetos y el mercado tienen una existencia independiente y esa creencia se convierte en realidad cuando esos objetos y su mercado se convierten en reales, en fenómenos independientes. La mercancía aparece como una realidad externa, casi independiente.
Fetichismo De La Mercancía: La base de este proceso es el trabajo que confiere valor a
las mercancías. El fetichismo de las mercancías implica el proceso por el que
los actores olvidan que es su trabajo el que confiere a las mercancías su
valor. Llegan a creer que su valor procede de las propiedades naturales de las
cosas o que el funcionamiento impersonal del mercado es lo que les otorga su
valor. Así, para los actores, el mercado realiza una función que para Marx los
actores son los únicos que pueden realizar: la producción del valor.
Capital: Como estructura independiente, el
capital (en manos de los actores que operaban en su propio beneficio, la
burguesía) explotaba a los trabajadores, los responsables de su creación. Marx
pensaba que el poder del capital aparecía como un poder otorgado por la
naturaleza, un poder productivo inherente al capital. Así las personas tendían
a divinizar el capital, a creer que por naturaleza, el sistema capitalista era
externo a ellas.
Propiedad Privada: Marx analizó el proceso por el que la propiedad privada se deifica en el capitalismo. Para Marx la propiedad privada, como los demás componentes estructurales del capitalismo, se deriva del trabajo de los trabajadores. La propiedad privada es el producto, la consecuencia necesaria del trabajo alienado, de la relación externa del trabajador con la naturaleza y con sí mismo.
División Del Trabajo: La idea básica de Marx sobre la división
del trabajo se deriva de la distinción entre los propietarios de los medios de
producción y los que se ven obligados a vender su fuerza de trabajo. A Marx en
particular le interesa la tendencia estructural por la cual las personas se ven
obligadas a especializarse en tareas cada vez a más específicas. Esta
especialización impedía que los actores se realizaran y expresaran su potencial
humano.
BIBLIOGRAFIA
·
Pensamiento económico, Karl Marx. (12 de marzo de 2014). Disponible en :
http://pensamientoeconomicocbc.blogspot.com/2012/04/karl-marx.html
·
La economía política marxista. (12 de marzo de 2014). Disponible en : http://www.uh.cu/centros/ceseu/BT%20-%20Economia%20norteamericana/IEM14.pdf
·
Karl Marx (1818-1883). (12 de marzo de 2014). Disponible en : http://www.fder.edu.uy/contenido/sociologia/clase-sobre-karl-marx.pdf
·
La economía de Karl Marx. (12 de marzo de 2014). Disponible en : http://www.eumed.net/ce/2010b/amp12.htm
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